Mesoterapia facial, un tratamiento de medicina estética

La mesoterapia facial es uno de los tratamientos más demandados y frecuentes en medicina estética. Se trata de una avanzada técnica que permite a la piel recuperar su juventud, a través de la elasticidad, la firmeza y el volumen.

Procedimiento

Este tratamiento de medicina estética consiste en la aplicación de determinadas sustancias, ricas en vitaminas y minerales. Es un tratamiento que se realiza de forma local, es decir, enfocando las inyecciones, mediante microagujas, en las zonas a tratar.

La eficacia de la mesoterapia facial radica en que, gracias a su procedimiento, que emple agujas, permite introducir la sustancia necesaria en el lugar necesario.

Este tipo de tratamientos de medicina estética se convierte en una herramienta indispensable para lograr una piel jovial, hidratada y con un aspecto saludable.

Sustancias de medicina estética

Algunas de las sustancias que suelen utilizarse en estos tratamientos de medicina estética son:

  • Aminoácidos

Los aminoácidos constituyen la base vital del metabolismo. Son los encargados de transportar y suministrar al organismo los nutrientes necesarios para conseguir un correcto funcionamiento. Además, estimulan la creación de elastina y proteínas.

  • Antoixidantes

Como su nombre indica, son los responsables de retardar o prevenir la oxidación de moléculas. Son utilizados para neutralizar los radicales libres, que se forman tanto por la pérdida como por la ganancia de un electrón. La oxidación se produce por la pérdida, mientras que la ganancia se considera una reducción.

  • Vitaminas

Son, sin duda, las sustancias indispensables para el organismo. En tratamientos de medicina estética como la mesoterapia, las más empleadas son las vitaminas A, B, C y E. Son vitaminas que contribuyen al desarrollo celular, mejoran y previenen las afecciones de la piel y estimulan la función de las células, entre otras funciones.

  • Minerales

Los minerales más frecuentes y recomendados en medicina estética son el azufre, el zinc, el hierro o el silicio, entre otros. Son minerales que favorecen la pigmentación, contribuyen a la producción de hemoglobina, regeneran el tejido cutáneo, etc.

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